26. ASTURIAS. HISTORIA, LENGUA Y TRADICIONES

Asturias (topónimo que proviene de los habitantes de las orillas del río Astura (Esla) STEU-R: “Amplio, ancho, paso difícil”. Otros estudiosos opinan que vendría del indoeuropeo ST-, AST- (agua) UR- “agua en altura, agua de las montañas) está situada en el noroeste peninsular, formando una Comunidad Autónoma denominada “Principado de Asturias”. Está en la costa cantábrica, entre Galicia y Santander, ocupando el sector centro-occidental –lo más elevado- de la Cordillera Cantábrica.

 01

Los Astures, que le han dado el nombre, fueron los pobladores del primitivo país astur: Asturias, las actuales provincias de León, gran parte de Zamora, zonas orientales de Orense y Lugo y una parte del distrito portugués de Braganza; limitaba al oeste con los Galaicos; al este, hasta el valle del Sella, con los Cántabros, al este y sureste con Vacceos y al sur con los Vetones.

Plinio (s.I) dice que entre los astures había veintidós pueblos diferentes (240.000 habit.) que venían del norte, y Estrabón describe en su libro de Geografía algunos datos interesantes, como que entre los astures hubo un régimen matriarcal con autoridad del hermano de la madre. En Asturias la palabra castro expresa una agrupación de casas donde habitaban los antiguos astures, cuyos estudios arqueológicos indican que esas casas eran hechas con piedras ovaladas o rectangulares. Mohías, San Chuis y Coaña conservan restos de esta época.

La conquista romana de Asturias terminó por las épocas de Augusto, al concluir las guerras cántabras que se habían iniciado el año 29 a.C.

En 585 el país fue ocupado totalmente por los visigodos, que expulsaron a los suevos. Al producirse la invasión musulmana (714), los hispanovisigodos se refugiaron en los montes astures. La confluencia con autóctonos y mozárabes fue la base humana para la reconquista.

Don Pelayo –noble visigodo refugiado en el monte Auseva- fue el que lideró la rebelión cristiana contra los musulmanes, derrotándoles en 722 en la batalla de Covadonga.

Expansi—n del Reino de Asturias

Expansi—n del Reino de Asturias

El primer rey asturiano, Don Pelayo, reinó durante 18 años en Cangas de Onís. A Pelayo le seguirá Fávila, que según la leyenda fue muerto devorado por un oso, animal totémico astur, tras dos años en el trono. Con Alfonso I, señor de Cangas de Onís, empieza una fase de expansión sobre la Meseta. Después de varios reyes, llegamos a Fruela I, que tras ser asesinado en su palacio de Cangas, desaparecerá la monarquía asturiana.

Al poco de fallecer Alfonso III, la capital del reino fue trasladada en 914 de Oviedo a León, y la monarquía empezó a decirse “leonesa”.

En 1388, con Juan I de Castilla, fue constituido el Principado de Asturias, título que han poseído los herederos de esa Corona primero, y después de España, hasta nuestros días.

 03

La lengua asturiana es el producto de la evolución del latín traído por los romanos en al territorio astur. Dicen que el documento más antiguo del romance asturiano es el “Fuero de Avilés”, del siglo XII. Desde este siglo al s. XIV, la lengua oficial en los documentos de Asturias y León es el asturiano. De aquí hacia delante empieza la castellanización, llegando una lengua decadente hasta nuestros días.

Según el texto del Estatuto de Autonomía de Asturias de 1981, el bable es lengua específica de Asturias y, aunque no llega a tener el estatus de oficialidad, se logra reconocer la existencia de la lengua asturiana y la creación de la Academia de la Lengua Asturiana como órgano oficial en el Principado de Asturias.

 04

Muestran a continuación algunos ejemplos de textos publicados en asturiano:

Del libro “El Principín”, del escritor francés Antoine de Saint-Exupéry, versión en llingua asturiana  del libro “El Principito” traducido por X. Ll. García Arias y Marta Suárez, transcriben el principio del primer capítulo:

05

“Siendo yo un neñín d’unos seis años vi una vez, nun llibru que falaba de la Selva Virxen, un dibuxu perguapu. El llibru titulábenlu Hestories vivies y el dibuxu yera un colobrón, una boa, tragando un bichu. Nel llibru diciense coses comu: “Les boes traguen tolo que pesquen ensin tarazalo. Llueu nun son a movese y pasen darréu seis meses durmiendo, faciendo la dixestión”.

Daquella escurrí munches vegaes nes aventures de la selva y foi entós cuandu con un llapiceru de colorinos fui a faer el mio primer dibuxu…”.

Del libro “Al Riscar” del Coletivu Pedagóxicu “La Puela-83), eligen lo siguiente del tema 21, “El nuestru pais”, referente a Asturies:

06

“…Asturias ta travesada por abondos ríos: Cares-Deva, Sella, Nalón, Narcea, Navia, Eo… y otros munchos más, toos ellos d’agües rápides que baxen del monte a la mar muncho bien, ya qu’Asturies ye permontañosa.

Mecíes coles montañes tien Asturies bones vegues y llerones, onde les vaques esfruten pastiando nel so sempiternu verdor y los pumares viñen les mazanes fasta’l estremu de facer besar les rames al noble suelu d’Asturies.

Tamién se topen na nuesa rexón bones güertes. Nos montes hay biesques de carbayos, castañales y fayeos. Tamién hai monte baxu onde pastien vaques, cabres y oveyes…”.

Del libro “Afalagando a mió Asturies” de J. Luis Aguirre Huerta, muestran algunas rimas asturianas:

07

“El mineru ta’n la mina,

e ne’l riu ta’l salmón,

la mazana ‘n la sidrita

y en les fabes el llacón”.

 

“Si ye que quieres falar bable,

déxame apurrite ‘n cable:

lo primeru diccionariu

y pa dispués… diccionariu”.

Muestran este precioso poema del libro de poesías en asturiano “A la gueta l’alba” de Xulio Vixil:

08

“Faime falta más d’un minutu pa dispidime,

faime falta tola vida pa poder dicite adiós.

Nun fuxas de mi enxamás”.

Del “Diccionario Ilustráu de la llingua Asturiana” de Xandru Martino Ruz, eligen unos cuantos vocablos, algunos se parecen muchísimo a los correspondientes aragoneses.

 09.jpg

Abiyota: Bellota. Aconseyar: Aconsejar. Afaitase: Afeitarse. Afalagar: Acariciar. Afayadizo: Acogedor. Albeitre: Veterinario. Alcordanza: Recuerdo. Alendar: Respirar. Alcordanza: Recuerdo. Alendar: Respirar. Amagüestu: Convite a base de castañas asadas y sidra dulce. Amistanza: Amistad. Amolar: Afilar. Aniellu: Anillo. Apiancar: Andar. Arcu la Vieya: Arco Iris. Aposentar: Calmarse. Arrodiar: Rodear. Artu: Zarza espinosa. Aspru: Áspero. Augua: Agua. Avergoñase: Avergonzarse. Avientu: Diciembre. Badagüeyu: Presagio. Baraya: Reyerta. Bicácanu: Nieto. Bilordia: Mentira. Bisgüelu: Bisabuelo. Blincu: Salto. Borrina: Niebla. Cabudañu: Aniversario. Caín: Viento del oeste. Caleya: Calleja. Camín: Camino. Cande: Blanco. Cansu: Cansado. Cantiellu: Cerro. Caramañola: Cantimplora. Cartafueyos: Conjunto de papeles escritos. Casoriu: Boda. Cayer: Caer. Cerroyu: Hinojo. Chaperu: Sombrero. Charrar: Charlar. Chucase: Acostarse. Chuchu: Beso. Clarión: Tiza. Conseyu: Consejo. Cosadiella: Adivinanza. Cuacar: Satisfacer. Embafiecar: Engañar. Empecipiar: Empezar. Enantes: Antes. Entá: Todavía. Entornadiella: Vuelco. Enxamás: Nunca. Esbariar: Resbalar. Escaecer: Olvidar. Escuayazase: Disgustarse. Esguil: Ardilla. Espantayu: Espantapájaro. Esquierdu: Izquierdo. Fala: Habla. Fame: Hambre. Fatu: Tonto. Feble: Débil. Fitu: Mojón. Fíu: Hijo. Fonte: Fuente. Fueya: Hoja. Furacu: Agujero. Gayoleru: Contento. Gochu: Cerdo. Goyera: Ojera. Güei: Hoy. Güeyar: Mirar. Güeyu: Ojo. Guetar: Buscar. Horru: Órreo. Llamazal: Barrizal. Llagu: Lago. Llar: Hogar. Ma: Madre. Mañandar: Madrugar. Memoriar: Recordar. Mercar: Comprar. Mocedá: Juventud. Moñeca: Muñeca. Moqueru: Pañuelo. Muxu: Gato. Nadal: Día de Navidad. Ñeve: Nieve. Noragüena: Enhorabuena. Nuechu: Noche. Osu: Oso. Oveya: Oveja. : Padre. Paralís: Parálisis. Paxarineta: Páncreas. Payares: Noviembre. Perrexil: Perejil. Pexe: Pez. Polu: Pulcro. Pruyimiento: Quiciabes: Quizá. Deseo. Redolada: Contorno. Refocilu: Relámpago. Ren: Nada. Retayar: Recortar. Reveníu: Pasado. Ríu: Río. Rosada: Rocío. Sacagüeyos: Libélula. Salguera: Sauce. Saltapraos: Saltamontes. Samartín: Matanza del cerdo. Seguranza: Seguridad. Semeya: Foto. Seronda: Otoño. Solombra: Sombra. Sortir: Aparecer. Suañar: Soñar. Tabierna: Taberna. Taragüelu: Tatarabuelo. Tastiar: Probar. Trebeyar: Jugar. Turbón: Tormenta breve. Vegada: Vez. Vergoña: Vergüenza. Viesca: Bosque. Xabalín: Jabalí. Xelar: Helar. Xiflu: Silbato. Xineru: Enero. Xinoyu: Rodilla. Xintar: Comer. Xiringar: Balancerar. Vuelta: Torno. Ye: Es/Está. Zaraza: Granizo. Zucre: Azúcar.

Los Zerris se quedan asombrados de las grandes semejanzas entre los léxicos aragonés y asturiano, demostración de la antigua unidad lingüística peninsular, rota después por el castellano, aunque posiblemente no tanto el castellano “viejo” como el “nuevo”, y no tanto el popular como lo de las capas sociales altas…

En el caso del asturiano y aragonés, a esta unidad de origen se juntan los parecidos medios naturales donde cuajaron ambas culturas montañesas, como muestran dichos, cantas, trabajos, costumbres…

A M. Martín le resulta curiosa muy especialmente la palabra asturiana “CARTAFUEYOS”, por su parecido con la palabra aragonesa “CATAFUELLOS”, que recopiló a Siñá Chusta Clemente, una de las últimas hablantes del aragonés del Valle de Vio (la variedad local más antigua y lingüísticamente conservada del aragonés popular).

CARTAFUEYOS, en asturiano significa “fajo, conjunto de papeles escritos, carpetas” y modernamente también “estudios, informes, reportajes”.

CATAFUELLOS, en el Valle de Vio significaba “discusiones, revuelos, disputas”.

A M. Martín se le ocurre que el origen de las dos palabras podría ser el mismo, habiéndose desviado en aragonés el significado primero -podría ser- debido al empleo casi exclusivo en siglos pasados de los papeles para cuestiones judiciales, escrituras notariales, etc. Pasando la palabra de expresar el “continente” (papeles) a la expresión del contenido (disputas, testamentos…) y convirtiéndose con el tiempo a un matiz de “negocios y asuntos turbios”, “desacuerdos”, “discusiones”.

No es una teoría demostrada, pero sí tiene algo de sentido.

Del libro “Refranero temáticu asturianu” de Xandru Martino Ruz, seleccionan algunos refranes que les han gustado:

 10

“¿Ayín, por qué salisti tan ruin?. Porque nun me plantesti per San Martín.”

 “El que nun tien gües, llabra enantes o dempués.”

 “¿Segasti? ¿amarresti? ¿enfacinesti?. si non, nada trabayesti.”

“Añu bisiestu viendi la fueya y quema´l cestu.”

 “Al gochu más ruin, la meyor castaña”.

 “Inxertar n´árbol vieyu, nin llena´l platu nin el güeyu.”

“Cirgüeyos y prunos, toos son unos.”

“Si per San Xurde xela, nun se coyerá muncha pera”.

 “Aforrar en perexil, esparcer en farina.”

“Antroxu, antroxu, el mio pote con carne y el tuyu con fenoyu.”

“Comer a fartucar y trabayar a reventar.”

“Del gochu´l xamón, y del centollu hasta´l cagayón.”

 “El bociar nun quier mentir: o fames o sede, o gana de dormir.”

 “En mayu, l´abeya y la oveya dexen la pelleya.”

“Per San Xuan, marcha´l cuquiellu y vien el tabán.”

“Tamos llabrando, dixo-y la mosca al güe”.

 “Al perru vieyu, echa-y llebre y non coneyu.”

”Al que muerde la fuina nun vuelve a llamber la escudiella.”

“Cuando l´osu anda a formigues, mal-y va coles sos comíes.”

 “Cuando canta’l picatueru, asuntu de mal agüeru.”

“Cuando munchos paxarinos s´axunten cabo´l llugar pa catar el so sustentu, ye que muncho va xelar.”

 “El que cueya la verbena la mañana de san xuan, nun-y picará culiebra nin bicho que-y faiga mal.”

“Al cabu del añu, más come el muertu que’l sanu”.

“La lluna d’ochobre siete llunes cubre”.

“Lluna nueva de Febreru, primer martes d’antroxu.” (garrastolendas)

 “Sol d’iviernu, amor de vieyu”.

“El fumu del mio fumeru güel a golorín de romeru”.

“Cada gochín al so cubil”.

“Encuéyite, que xela y tien furacos la manta vieya”.

“Casa quiero, pa xintar la flor del pucheru”.

“Caséstite, caguéstite”.

 “Cuánto quixera tar yo onde la mio muyer me suaña”.

“A los quince, nun hay gaiteru que nun infle”.

“El que de mozu nun trabaya, de vieyu duerme na paya”.

“Vino puro y l’ayu crudo, faen andar al mozu agudu”.

“Ten curiáu cola pelleya, que nel teyáu de to casa cantó anueche la corneya”.

“Si yes llistu y agudín, dígalo’l vecín”.

“Al avarientu y al probe nun hai migaya que-yos sobre”.

“Agua blando en piedra dura, tantu da hasta que fura”.

“Pocu a pocu, fila la vieya el copu”.

 “Al payar y al horru, un solo”.

“Navaya que mal taya, onde taya destrabaya”.

“Val más arrodiar que mal atayar”.

“Un nun ye dengún y dos faen ún”.

“Un xoxu chenu de paz val inda más qu’un palaz”. (xoxu: cercado de piedra)

“Lo que ye del común, ye de dengún”.

 “El qu’abondo fala, cuando nun yerra, esbarria”.

 “Muncha xente xunta, daque barrunta”.

 “Muyer paridera, fiya la primera”. (si la muyer ye paridera, convien-y que la primera seya fiya, pa qu’aude en casa”)

“El que s’atecha debaxo de fueya tres veces se mueva: lo que llueve, lo que pinga y lo que xiringa”.

 “Cuando la candela llora, l’ivierno va fuera; que llore, que dexe de llorar, la metada l’ivierno ta por pasar”.

“Arcu de vieya pela tardiquina, agua pal otru día.”

“Borrina de marzu, xelada en mayu”.

“De mayu a San Martín, el cierzu por vecín”.

“En Xineru, de día al sol, de nueche al braseru”.

“Xineru moyáu, bonu pal campu y malu pal ganáu”.

 “Quien tien de paya la culera que nun s’arrime a  la foguera”.

“Una mexada ensin peu, ye como una romería ensin gaiteru”. (una pichata sin de pedo ye…).

“Cuando la gallina pica al gallo, bon añu.”

 “Febreru d’amargura, que berren los corderos y oveyas denguna.”

“Caséme con María Moñaca porque tenía güe y vaca, el güe y la vaca morrieron y quedóme maría moñaca”.

 “Cuando ye secu xineru, verás fartucu’l graneru”.

 “Arcu iris con bon tiempu, señal segura de vientu”.

“Este claru y Sur escuru, temporal seguru”.

“Xineru branu, iviernu tol añu”.

“Lleña umeriza, nin fueu nin zeniza, mal pal que l’acarreta y peor pal que l’atiza”.

 “Cierzo na sierra, agua na tierra”.

“Dixo y el fresnu a la faya: Si nun fuera por vergoña, ardía debaxo l’agua”.

“¿Cómo criaste tanto neñín?. – Queriendo siempre al más pequeñín”.

“Dios me las dea delgaes y fresques, que gordes y goches yá se fadrán elles”.

“Lluna en pie, marineru echáu; lluna echada, marinear en pie”.

“Marineru con paragües, afilador”.

 “A ballena chombada nun-y pierdas mirada”.

“Ye más el ruxíu que l’agua del ríu”.

“Bien xuega a la pelota, pero non gana nin xota”.

“De xineru a xineru va’l dinero pa’l banqueru”.

“Nadie tien más que’l que quier aforrar”.

“Barriga farta quier gaita”.

“El que xifla, canta quier”.

“Son de buxu les mios castañueles, veníi a oyeles”.

“Arcu Iris pela matina, prepara la capina”.

“El Ferreru, de tantu machacar, perdió l’oficiu. (como lo ferrero de Pancrudo)”.

“Poco importa’l nome, lo que val ye l’home”.

“Val más tazón de prau que punta de colláu”.

“Munchos oficios tien Peirón, y nengún ye bon”.

“Aldovina, aldovinanza, ¿cuál ye’l bicho que pica na panza?. – La Fame”.

“Qué cosa cosadiella ye: Cuanto más se mira menos se ve. – El Sol”.

“Pente una matona espesa fura-fura la cabeza. Puyapuyando, rampapenando, coxiquexando. – La culiebra”.

 

Muestran palabras y expresiones asturianas para el momento de la muerte, entresacadas del libro “Costumbres asturianas” de Elvira Martínez:

11

“Estirar la pata, Dar geranios; dar ortigas, Ir al barrio de los calvos, Dejar la cayá, Ir al güertu de Serafín, Espurrir la pata; Espurrióla, Dar moju, Pinar el golallu, Dejar la cuchar; dejar de fumar, Pálmala como Filipón, Empálmala, Olvidósei respirar, Espicharla, Diñarla, Cascar, Comióla la guaxa, Cerró el gueyu, Llastir a Camplengu, Fuese, Cincarla, Dejar de leer, Poner la gabardina de madera, Dejó la peleya, Quedóse, Enfurruñó el focicu, Apañólu”.

Otra costumbre curiosa es la Esfoyaza: “Xunta de xente de nuiche, pa esfoyar y facer riestres de panoyes, y al rematar danyos corbates y gaxos de boroña”. (Reunión vecinal para deshojar las mazorcas).

“La postrer nuiche ya d’Octubre yera

y acabóse temprano la esfoyaza,

la xente valadora y placentera

de comer la garulla daba traza:

había de figos una goxa entera,

peres del fornu, gaxos de fogaza.

Y tizaban el fuevu con tarucos

fartos de reblincar los rapazucos”.

En la noche de San Juan hay una costumbre “vaqueira”:

“Ahumar a los niños y al ganado; la hoguera para este sahumerio se hace con foleto (helecho), laurel bendito, finoyo y cimble (sándalo). También se echa uno o dos cagajones de cerdo”.

Con la fiesta de San Juan comienza la luz, el verano, por eso este dicho:

“Escampa, borrina, escampa,

debajo, p’arriba,

por toda la ballina,

que ahí viene San Juan,

con el caballo ruan,

la perrina falduca,

y la Virgen que le ayuda”.

Como personajes de la mitología asturiana están el ñuberu y el trasgo:

El ñuberu es un ser extraño del que afirman los asturianos que vive en Egipto, y que secretamente viene a regar con agua del Nilo las cosechas asturianas. Es capaz de provocar tormentas y granizadas. Le dicen también “cabritu” y puede traer consigo un viento muy particular, que es a la vez todos los vientos y ninguno. Para asustarlo lo mejor es repicar las campanas, pues el ruido de éstas es el único que le hace huir, pues cree que semejante ruido es un asunto del Cielo.

El trasgo es un duende casero que espanta a los niños. Enano, con sombrero rojo, corre a saltos y nadie puede saber si va calzado o va descalzo. Lo que sí se sabe es que tiene cola y es cojo. Cuando se instala en una casa lo que más le gusta es remover la cocina, la “llar” y la cuadra. Si prueban a echarlo se vuelve malo y rompe todo tipo de cacharros que encuentra; pero si por el contrario, lo aceptan, fácil es que se ponga a planchar, barrer o fregar.

Desde Cangas de Onís marchan hacia Oviedo (72 kms.).